Investigación Teatral. Revista de artes escénicas y perfomatvidad

DOI: 10.25009it.v15i25.2769

Reseña de puesta en escena

Vol. 15, núm. 25, abril-septiembre 2024

Centro de Estudios, Creación y Documentación de las Artes, Universidad Veracruzana, México

ISSN: impreso 1665-8728 ׀׀ electrónico 2594

Manuel Hiram y los cuerpos con luz

Alonso Alarcón Múgica*

* PPGDan/Programa Institucional de Pós-Doutorado, Universidade Federal do Rio de Janeiro, Brasil. e-mail: alonsocrea@gmail.com, 0000-0002-7779-6372

Recibido: 15 de septiembre de 2023   ׀׀    Aceptado: 07 de noviembre de 2023

Tortajada Quiroz, Margarita. Manuel Hiram y los cuerpos con luz. Ciudad de México, Secretaría de Cultura, Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, Universidad Veracruzana y Editorial Nicolasa, 2022, 438 pp. ISBN: 978-607-605-740-7 (INBAL) / 978-607-8858-79-8 (Universidad Veracruzana) / 978-607-59482-1-8 (Editorial Nicolasa).

El libro Manuel Hiram y los cuerpos con luz de la investigadora Margarita Tortajada Quiroz fue publicado en 2022, en coedición entre la Secretaría de Cultura, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, la Universidad Veracruzana y la Editorial Nicolasa con el apoyo del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales (SACPC), a través de la vertiente “Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales” (ver Imagen 1).

Imagen 1. Portada del libro Manuel Hiram y los cuerpos con luz, 2022, México. Foto tomada en 1995 por Raúl Velásquez.

Para la lectura de este libro, inicio situándome desde la mirada de un coreógrafo e investigador que ha sido formado por la doctora Margarita Tortajada, quien fue mi profesora de investigación de la danza y sinodal de mi examen de grado en la Maestría en Artes Escénicas de la Universidad Veracruzana. Amiga, colega, tutora, aliada, a quien debo decisiones importantes en mi formación académica –como haber elegido el programa de Doctorado en Historia del Arte de la UNAM– y quien, de muchas maneras, ha estado presente en mis proyectos artísticos y académicos con Ángulo Alterno Danza y el Danza Extrema Festival Internacional.

Tortajada es una referencia indispensable para aproximarnos a la historia de la danza en México. Su producción investigativa desde el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de la Danza José Limón, así como sus múltiples publicaciones de amplio alcance, dan cuenta de un profundo rigor metodológico cuantitativo y cualitativo que pone en diálogo los datos duros y una riqueza de fuentes bibliográficas, hemerográficas, archivísticas, iconográficas, orales y testimoniales, con la empatía y el amor que sus pesquisas articulan hacia los artistas de la danza, sus producciones estéticas e historias.

Es pionera en investigaciones que relacionan la danza con los estudios de género y las masculinidades. Sus historias son un legado que nos ayudan a comprender la conformación del campo artístico de la danza en México del siglo XX. Por todo lo anterior, el libro que hoy nos convoca, Manuel Hiram y los cuerpos con luz, es una oportunidad invaluable para acercarnos al diálogo íntimo que sostuvieron a lo largo de diez años, entre 2012 y 2022, el maestro Manuel Hiram y la investigadora Margarita Tortajada.

El volumen de 438 páginas se divide en introducción, cinco capítulos, anexos y fuentes consultadas. La organización del texto permite al lector aproximarse a la vida de Manuel Hiram, artista veracruzano nacido en el puerto de Tuxpan, el 18 de julio de 1930. En este libro narra, como fuente primaria, sus vivencias, experiencias y memorias por los territorios de la música, la ingeniería, las artes plásticas y la danza. Relatos que Tortajada va acuerpando en una biografía que nos lleva a recorrer las múltiples facetas de Manuel Hiram como “bailarín, maestro, coreógrafo, director, ensayador, iluminador [y] repositor” (Tortajada 11), siempre en diálogo con el contexto político, cultural y social del que la vida de un artista de 90 años puede dar cuenta.

El libro inicia con los relatos testimoniales sobre el origen de Manuel Hiram en Tuxpan, Veracruz. A través de entrevistas a profundidad realizadas por Tortajada, los primeros textos nos permiten viajar a la Huasteca veracruzana para empaparnos de su contexto familiar y conocer a Manuel Pérez y María Sánchez, padres del protagonista, así como reconocer algunos pasajes de su infancia en una ciudad “llena de mangos, papayas, naranjos y guayabos” (Tortajada 19-20). Nos narra su llegada a la Ciudad de México y su formación musical en el Conservatorio Nacional de Música, así como su paso por la Academia de San Carlos de la unam, donde estudió artes plásticas y nos cuenta la gran importancia que tuvo para él la obra de Frida Kahlo, así como su decisión radical de dedicarse a la danza moderna nacionalista, como una pulsión que identificó en su clase de Dibujo en Movimiento en la que veía y dibujaba bailarines.

Tortajada nos permite seguir la ruta apasionante de Manuel Hiram por la Academia de la Danza Mexicana y su vinculación, a mediados de la década de 1950, con personajes de la danza como Merce Cunningham y Waldeen von Falkenstein, considerada una de las pioneras de la danza moderna nacionalista en el país, con quien ensayó las coreografías En la boda y El hombre fue hecho de maíz. El libro nos permite atestiguar la participación de Hiram como un bailarín que fue parte de la histórica ruptura con la danza moderna nacionalista, ya que participó con los maestros Xavier Francis y Bodil Genkel en el Nuevo Teatro de Danza, compañía de la que fue bailarín profesional y que marcó su línea estética como maestro de danza.

Esta obra de Tortajada teje una serie de relatos novedosos de la historia que nos hermana con Cuba mediante la danza y, en este caso en particular, nos acerca a la larga estancia de Manuel Hiram en la isla, entre 1960 y 1971, donde conoció a Alicia Alonso y Fernando Alonso, y donde tomó clases en el Ballet Nacional de Cuba. La autora describe con una riqueza de fuentes y documentos cómo Hiram fue pieza fundamental de los orígenes del Conjunto Nacional de Danza Moderna de Cuba al lado de Ramiro Guerra, padre de la danza moderna cubana. Este libro le permite al lector conocer de primera mano la estrecha relación entre ambos artistas, su legado con la fusión de la técnica Graham y las raíces de danzas africanas dando origen a la danza moderna cubana y su posterior relación a través de cartas. La autora también cuenta la historia de Manuel Hiram con su amiga y compañera Elena Noriega, su incursión en la coreografía y su despliegue artístico en Cuba como regisseur, iluminador, organizador y negociador, roles que a su regreso a México, a principios de la década de 1970, replicaría con el Ballet Independiente (BI).

Su paso por Cuba fue muy importante, ya que, como lo señala Schwall en el libro de Tortajada, Manuel Hiram “fue parte del grupo de mexicanos y cubanos cuyo trabajo demuestra cómo las relaciones interpersonales, en diálogo con la geopolítica e ideología, conformaron la guerra fría en términos culturales en Latinoamérica, y los cambios que vivieron” (Schwall citado en Tortajada 122). Es de mi particular interés el apartado titulado “Una ‘piedrita en el arroz’: la persecución”, en el que la investigadora narra que

Los bailarines cubanos de esa época se enfrentaban al mismo fantasma que en México y muchas partes del mundo: ser señalados como homosexuales, independientemente de su preferencia sexual […] la revolución cubana debía ser ‘viril’, una ‘explosión de masculinidad’, siguiendo los patrones hegemónicos heteronormativos. De tal manera que cualquier actividad o conducta que se alejara de esa imagen era castigada, y en Cuba, penalizada ( ibidem 123).

Tortajada nos ofrece a los lectores un relato indispensable sobre la homofobia en la Revolución cubana, el cual es descrito en amplios pasajes que se cuentan a través de la amistad de Manuel Hiram con el bailarín cubano Guido González. Indiscutiblemente, es un texto que aporta una perspectiva crítica e impecablemente documentada para adentrarse en las persecuciones, la censura y el destierro en la isla caribeña.

El libro también nos proporciona a detalle la importante labor de Manuel Hiram en el Ballet Independiente (BI) desde 1972, donde se desempeñó como iluminador, ensayador, regisseur bajo la dirección de Raúl Flores Canelo y Gladiola Orozco. Tortajada nos permite adentrarnos en las disputas al interior de la compañía por la llegada de Michel Descombey como director asociado en 1977, la desbandada de bailarines y las diversas rupturas internas, hasta llegar al sello particular que imprimió Hiram como director de la compañía , rol que asumió al fallecer Flores Canelo en 1992, el cual trajo un cambio generacional de integrantes y la participación de sus jóvenes bailarines en el Concurso Interior de Coreografía. Entre otros, Tortajada menciona a Mario Alberto Frías, Sara Salazar, Jayahuata Chávez, Genoveva Hernández, Jorge Marcos Manuel, Juan Manuel Ramos, Elisa Rodríguez, Javier Báez y Joaquín Hernández . La autora narra el momento en que Manuel Hiram fue despedido injustamente por Magnolia Orozco (viuda de Flores Canelo) el 3 de febrero de 2004 y la desbandada de bailarines que se salieron del BI en apoyo a Hiram.

En su capítulo final, la obra de Tortajada traza las emotivas andanzas de los últimos 15 años de Manuel Hiram y su vínculo afectivo con el proyecto escénico Tierra Independiente, el cual surge bajo la dirección de los bailarines y coreógrafos Paulina Álvarez y Helmar Álvarez, exintegrantes del Ballet Independiente que mantienen su sede artística en Oaxaca y quienes fueron los artífices para la realización de esta investigación. Según relata Tortajada, “el libro surgió luego de una ‘emboscada’ de Tierra Independiente en 2012, cuando me propusieron hacer este trabajo. […] Más tarde, conté con Paulina para reencontrarme con Manuel Hiram (luego del sismo del 2017 y de su cambio de domicilio en 2019)” (Tortajada 13). Por ello, se trata de un libro que nos permite sentir a través del texto “la luz de Manuel Hiram en la diversidad de la danza y sus reflexiones: iluminar los sentimientos” (ibidem 297).

El volumen incluye materiales de gran valor, como fotografías que van ilustrando los testimonios del artista, así como poemas escritos por Manuel Hiram, cartas de Ramiro Guerra, bocetos de iluminación, guiones y un catálogo de diversas obras, que son incluidos en la sección de anexos (ver Imagen 2). Todo lo anterior, articulado en un trabajo editorial impecable y propositivo desarrollado por Hayde Lachino con su editorial independiente Nicolasa y arropado por la Secretaría de Cultura, el inbal y la Universidad Veracruzana. La investigación desarrollada durante diez años por Margarita Tortajada y que da cuerpo a este libro es una invitación generosa que nos aproxima a la vida y obra de Manuel Hiram. Además, da cuenta de una labor invaluable historiográfica y editorial en el campo de la danza mexicana.

Imagen 2. Manuel Hiram, Rocío Sagaón y Rodolfo Reyes en Tuxpan, Veracruz, 1955. Foto de Miguel Covarrubias.