Investigación Teatral. Revista de artes escénicas y perfomatvidad

DOI: 10.25009/it.v13i22.2729

Presentación

Vol. 13, núm. 22, octubre 2022-marzo 2023

Centro de Estudios, Creación y Documentación de las Artes, Universidad Veracruzana, México

ISSN: impreso 1665-8728 ׀׀ electrónico 2594-0953

Presentación

Carlos Gutiérrez Bracho*

*Universidad Veracruzana, México. e-mail:cargutierrez@uv.mx

 

El presente número de Investigación Teatral fue editado en un momento de gran incertidumbre mundial debido, en primer lugar, al conflicto armado entre Ucrania y Rusia que ha puesto al mundo en una situación de tensión que no veíamos desde los tiempos de la Guerra Fría, así como a los efectos sociales y económicos después de los meses de crisis sanitaria derivada por la pandemia de Covid-19. Momentos como éstos suelen provocar grandes nerviosismos sociales y dejar una huella profunda en las sociedades. También se convierten en una oportunidad para reflexionar sobre qué podemos hacer desde las artes escénicas para contribuir a que la humanidad transite hacia un mayor bienestar para todos. En este sentido, el texto de Diana Taylor que abre el actual número 22 de la revista, “Actos de memoria reparadora”, adquiere una particular relevancia. La reconocida teórica de la Universidad de Nueva York nos lleva a reflexionar sobre la posibilidad de imaginar futuros habitables ahora que estamos teniendo que lidiar con el trauma de la pérdida, tanto de vidas humanas, como de medios de subsistencia, ecosistemas devastados, así como de cada vez más profundas desigualdades sociales y sociales. Para ello, Taylor propone prácticas de memoria reparadoras que promueven, a través del performance y de la multidisciplinariedad artística, maneras de animar la comunicación en comunidad. Se trata del arte de la memoria que, para ella, nace del trauma pero que tiene el potencial de contribuir a la reparación social.

Desde la Universidad de las Artes, en La Habana, el joven investigador José Antonio García Caballero nos trae un análisis de la obra Jardín de héroes del dramaturgo cubano Yerandy Fleites y que, desde su punto de vista, propone un “reposicionamiento” de los arquetipos de las antiguas tragedias griegas en la tradición dramatúrgica cubana. Para García Caballero, la dramaturgia de Fleites es pionera en la nueva generación de textos cubanos que revistan los antiguos mitos griegos.

Por su parte, la investigadora mexicana Socorro Merlín aborda un tema poco estudiado, el de las formas de diversión festiva en las antiguas culturas mesoamericanas mexica y maya. En este trabajo la autora hace un recorrido de cinco siglos por estas expresiones, lo cual, según expone, produce una semiósfera entre el pasado y el presente, “de dimensiones inconmensurables”, lo que muestra las huellas que nos dejaron estas culturas originarias en la actualidad.

También sobre la memoria, pero ahora desde su dimensión ontológica, es el estudio que nos trae Jonathan Caudillo, de la Universidad Iberoamericana, en “Teatralidades del cuerpo y la memoria, un diálogo posible entre Bergson, Beckett, Nietzche y Grotowski”. La analiza desde la teatralidad en cuanto manera de pensar las estructuras modernas de representación. Para ello se vale del pensamiento de los mencionados filósofos y creadores clave de la escena europea para plantear que la teatralidad es “un aparato” que moviliza la memoria y que repercute en nuestra manera de habitar el mundo, en un sentido ontológico, ético y político.

Otro investigador de la Universidad de las Artes de Cuba, Miguel Ángel Amado González, propone un recorrido histórico sobre la dramaturgia del clown cubano. Se trata de un arte que tiene una influencia importante de los circos soviéticos, que llegaron a la isla en la década de 1970. Quizá lo más llamativo es que el paradigma clown en este país sufrió un cambio fundamental, de ser estas figuras creadas exclusivamente para la risa, se convirtieron en una “potente arma ideológica” acorde con los cambios sociopolíticos de la época.

La investigadora Marina L. Sarale, en “Entre el método y el laboratorio: el ethos en la formación de actrices/actores en la tradición teatral mendocina”, se pregunta cómo se configura el ethos en el proceso de formación de artistas escénicos en la Ciudad de Mendoza, Argentina. En este trabajo, encuentra dos modos dominantes en la tradición teatral de esta ciudad. Una, a través de la constitución moral de los estudiantes; el otro, por medio de saberes técnicos en el espacio de laboratorio.

En “Danza contemporánea independiente. Trayectoria hacia la institucionalización”, Margarita Tortajada ofrece un estudio detallado sobre el Movimiento de Danza Contemporánea Independiente mexicano, con la finalidad de ubicar la posición que la artista Lydia Romero ha ocupado en el campo artístico (Bourdieu). De acuerdo con la autora, este movimiento, en la década de 1970, transformó el campo dancístico y el subcampo de la danza contemporánea en este país.

En la sección de Documento, María Azucena Feregrino nos entrega una entrevista a la actriz, investigadora y académica Aimée Wagner y Mesa, quien fue la primera mujer en dirigir el departamento de Literatura Dramática y Teatro de la UNAM y fue en su gestión cuando se convirtió en Colegio. Entre otros temas, en esta charla habla de su familia –es hija del importante director teatral mexicano nacido en Alemania Fernando Wagner–, de su labor como actriz e investigadora y de la enseñanza teatral en la UNAM .

En la sección de Testimonios contamos con un relato sobre la 41 Muestra Nacional de Teatro, por parte de René Alejandro Rodríguez, egresado de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana. El autor nos hace una narración de lo que fue su experiencia como participante invitado en dicha Muestra, la primera que se llevó a cabo de manera presencial después de los meses de cuarentena por Covid-19.

En nuestra sección de Reseñas colaboran dos egresadas de la Maestría en Artes Escénicas de la UV. Karina Castro escribe sobre el libro Insignificantes en diálogo con el público. El teatro de la generación FONCA, de Daniel Vázquez Touriño, editado en Madrid. Se trata de un trabajo que muestra un análisis sobre la transición estética de la dramaturgia mexicana de los siglos XX y XXI. Asimismo, Mary Carmen Lara Orozco analiza Vida que resurge en las orillas. Experiencias del taller de mujeres, arte y política en Ecatepec, editado por Manuel Amador y Rafael Mondragón, y el cual estudia la violencia de género y los feminicidios, a partir de la labor educativa del maestro, performer y activista Manuel Amador Velázquez.

Concluimos este número con un homenaje a uno de los dramaturgos mexicanos más importantes de las últimas décadas: Luis Enrique Gutiérrez Ortiz Monasterio, mejor conocido como LEGOM, quien falleció este año y a quien Rodolfo Obregón –autor de este In memoriam– lo define como “un fenómeno, en varias de las acepciones de este vocablo”.

No nos queda más que invitar a nuestros queridos lectores a que revisen cada uno de estos textos que, creemos, aportan significativamente al estudio de las artes escénicas en México y otros países de nuestro hemisferio.